Has creado tu página con ilusión. Pero después de un tiempo, te das cuenta de que nadie se queda, nadie compra, nadie te escribe. Y no es por tu idea, ni por tu falta de esfuerzo. Es porque estás cometiendo 1, 2, o 3 errores web, que nadie te enseñó a evitar.
Llevo años trabajando con emprendedoras como tú, y estos son los fallos que más veo repetirse pero tranquila, lo mejor de todo, es que tienen una solución fácil.

1. No sabes dónde hacer clic (y tu usuaria tampoco)
El primero de los 3 errores web que cometen muchas emprendedoras, y que, quizá tu también lo estés cometiendo es: Un menú con demasiadas opciones. Botones que no llevan a ninguna parte. Páginas importantes escondidas.
Imagina entrar a una tienda sin pasillos, sin rótulos, sin escaparate. Todo está ahí, pero no sabes por dónde empezar.
Eso es lo que siente una persona al entrar en muchas webs de emprendedoras.
Los menús están llenos de secciones que suenan bien, pero que no guían.
Ejemplo real:
- Inicio, Sobre mí, Servicios, Blog, Contacto.
Vale… pero, ¿cuál es el siguiente paso? ¿Qué me recomiendas? ¿Por dónde empiezo?
Además, muchas veces lo más importante está escondido:
- El botón para contratar está en una subpágina del blog.
- El lead magnet está enterrado entre párrafos.
- El formulario de contacto solo aparece si haces scroll durante 3 minutos.
📌 Una web sin jerarquía ni llamadas a la acción claras no convierte.
3 tipos rápidos de estructura
- Define una estructura sencilla: Inicio → Servicio principal → Quién eres → Cómo contactarte.
- Usa botones claros y visibles.
- Prioriza lo que tú quieres que pase: ¿quieres que se apunten? ¿Que te escriban? ¿Que lean algo?
2. Hablas de ti, pero no de lo que resuelves
El segundo error de los 3 errores web más comunes, es uno de los más humanos. Queremos contar quiénes somos, de dónde venimos, por qué hacemos lo que hacemos…
Pero a quien llega a tu web le importa algo muy simple:
¿Esto me puede ayudar a mí?
Una web que dice:
“Soy Ana, terapeuta floral con 10 años de experiencia…”
…puede sonar profesional, pero no responde a lo que la persona busca.
En cambio, una que dice:
“¿Tu perro está ansioso y no sabes cómo ayudarle? Aquí encontrarás herramientas naturales y apoyo real.”
…atrapa, conecta, invita a seguir leyendo.
El usuario necesita sentir que lo entiendes antes de saber tu historia.
Tip rápido sobre ti…
Cuenta tu historia desde un enfoque útil: ¿cómo tu experiencia mejora su situación?
Empieza tu web hablando del problema que resuelves.
Usa el “yo” solo después de haber mostrado que comprendes al “tú”.
3. No hay una acción clara que seguir
Y este es el terceros de los 3 errores web que te he comentado, aquí es donde muchas webs fallan, incluso si tienen buen diseño y buen contenido.
Entrás, lees algo interesante, pero cuando llegas al final…
👉 No hay botón.
👉 No hay “¿y ahora qué?”.
👉 No hay siguiente paso.
Eso es como dar una charla muy buena y luego irte sin decir dónde pueden encontrarte.
📌 Si tu web no indica qué hacer después… la persona se va. Punto.
Tip rápido: guíalos…
No tengas miedo de guiar: si no lo haces tú, lo hará el scroll hacia fuera.
Añade botones visibles al final de cada página o sección.
Usa frases tipo: “Si esto te suena, únete aquí” o “Descarga la guía gratuita”.
¿Tu web comete alguno de estos errores?
No te frustres. Es normal.
El diseño bonito no lo es todo. Lo que importa es la estrategia detrás.
Y eso, sí se puede aprender.
🎁 En It’s Free te enseño desde cero a construir una web clara, estratégica y con tu estilo propio.
Un ejemplo real de lo que te cuento
¿Te cuento algo?
Yo también pasé por eso. Tener una web con textos bonitos pero sin estrategia, sin guía, sin estructura.
Por eso te enseño lo que enseño. Y por eso creé Zoofarmacognosis.com aplicando lo que te acabo de contar:
✅ La home está pensada en lo que el usuario necesita: qué es la zoofarmacognosis, cómo puede ayudar a los animales, y cómo empezar.
✅ El sobre mí no desaparece, pero está en el footer. No es el protagonista.
✅ En el blog, comparto experiencias personales, casos reales y contenido útil que responde a dudas concretas.
No cuento mi historia para rellenar. Cuento lo que ayuda.
Y así, la web deja de ser “una web bonita” para convertirse en una que funciona: que informa, posiciona y acompaña.
💡 Eso es lo que quiero que aprendas tú también.
¿Quieres seguir aprendiendo?
Además de evitar estos 3 errores web, te invito a leer estos dos artículos sobre si tu web sirve para vender y como crear con IA servicios digitales.